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El kitesurf es uno de los deportes acuáticos más apasionantes y ha evolucionado rápidamente en los últimos años, tanto en tecnología como en técnicas. Cada vez son más los aficionados a este deporte: los principiantes aprenden a controlar la cometa en tierra antes de aventurarse en el agua, donde las primeras lecciones se centran en el arranque, la navegación en distintas direcciones y el control de la velocidad.
Y por cierto, mucha gente se pregunta qué velocidades medias y máximas se pueden alcanzar en función de la experiencia de cada uno. Vamos a intentar responder a esta pregunta, empezando por los factores que determinan la velocidad en el kite.
¿Qué influye en la velocidad en el kitesurf?
La velocidad de un kiter puede ser influido por varios factores.
El tipo de cometa es uno de ellos. La cometa delta, en forma de arco, te permite alcanzar velocidades más altas que las cometas C. En cuanto a la tabla, las tablas más grandes y estrechas pueden acumular más velocidad (siempre que el agua esté perfectamente plana). Es importante elegir el tamaño de la cometa en función de tu peso y de las condiciones de viento del lugar donde practiques: las tablas más grandes te permiten empezar a navegar con menos tracción de la cometa, es decir, con menos viento.
La técnica desempeña un papel importante a la hora de determinar la velocidad máxima alcanzable. Ir más rápido implica encontrar la trayectoria correcta con respecto a la dirección del viento, limitando el ángulo y la resistencia del borde. El objetivo es reducir al máximo la fricción.
El peso del piloto es otro aspecto a tener en cuenta. Por cada 4,5 kg más de peso, necesitas un nudo más de viento para navegar.
Por último, pero no por ello menos importante, la velocidad y la constancia del viento son decisivas para la elección del equipo y el rendimiento en el mar. En condiciones de viento flojo, se necesita una cometa más grande para generar suficiente potencia para arrastrar al kiter, mientras que con vientos más fuertes, se puede optar por cometas más pequeñas para evitar una potencia excesiva que podría ser peligrosa.
Lee también Cómo hacer kitesurf: guía paso a paso para principiantes
¿Cuáles son las velocidades medias alcanzables?
Vayamos al grano: la velocidad que puede alcanzar un kitesurfista varía en función del nivel de experiencia, las condiciones meteorológicas y el equipo utilizado. En general, los kitesurfistas principiantes e intermedios navegan a velocidades de entre 24-25 y 40 km/h. A estas velocidades, se puede controlar la cometa y obtener muchas satisfacciones, incluso si se es principiante.
Con la experiencia, los kitesurfistas experimentados pueden alcanzar velocidades más altas, acercándose o superando los 60 km/h: en las competiciones, los profesionales o semiprofesionales pueden rozar y superar los 80 km/h.
Aunque las altas velocidades pueden dar un “chute” de adrenalina, siempre hay que ser consciente tanto de las propias habilidades como de las condiciones del mar, y nunca carecer de equipo de seguridad. Con la práctica y la experiencia, los kitesurfistas pueden ir superando gradualmente sus propios límites a la vez que mejoran sus habilidades y conocimientos de este deporte.
En cuanto a los récords de velocidad, el francés Alexandre Caizergues ostenta el récord absoluto: rozó los 107 km/h en Luderitz, Namibia. Sylvain Hoceini , por su parte, batió el récord de velocidad en una distancia de 1 milla náutica (unos 1.852 metros), superando los 72 km/h.
Velocidad en kitesurf: ¡no descuides la seguridad!
Buscar la velocidad puede ser emocionante, pero la seguridad debe ser siempre lo primero, sobre todo cuando el viento es fuerte o el mar está agitado. La mayoría de los kitesurfistas tocan alrededor de 20-30 km/h: ir demasiado rápido aumenta el riesgo de lesiones en caso de caída: en aguas agitadas el peligro aumenta.
Ir rápido es cuestión de adrenalina, pero eso no es todo: también y sobre todo requiere un buen dominio técnico y respeto por el mar y las condiciones meteorológicas. Los kitesurfistas, sobre todo al principio, deben buscar siempre un equilibrio entre velocidad y seguridad, diversión y precaución.
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En conclusión
El kitesurf es un deporte acuático extraordinariamente adictivo, donde la velocidad es la reina: en ella pueden influir variables como el tipo de cometa, el tamaño de la tabla, el peso del rider y, por supuesto, las condiciones del viento, sin olvidar la importancia de la técnica.
Aunque la búsqueda de la velocidad es un rasgo fundamental, la seguridad es aún más importante. No todo el mundo puede batir récords de velocidad como hizo el francés Alexandre Caizergues: hace falta equilibrio entre la adrenalina de la velocidad y la precaución. Por término medio, los kitesurfistas principiantes e intermedios pueden alcanzar velocidades de entre 24-25 y 40 km/h, suficientes para una experiencia divertida y segura.
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Para llevar
- Antes de buscar la adrenalina de la velocidad en el kitesurf, es esencial que cada practicante se centre en la seguridad y en un conocimiento profundo de sus propias capacidades y de las condiciones del mar. Este enfoque prudente garantiza una diversión responsable y reduce el riesgo de lesiones;
- En la velocidad del kitesurf influyen varios factores, como el tipo de cometa, el tamaño y la forma de la tabla, el peso del navegante y las condiciones del viento. Una adecuada adecuación entre el equipo y las condiciones meteorológicas/marinas es crucial para optimizar el rendimiento y garantizar la seguridad;
- Los principiantes pueden esperar navegar a velocidades entre 24-25 y 40 km/h, mientras que los kitesurfistas más experimentados pueden llegar hasta los 60 km/h y más, dependiendo de las condiciones y el equipo. Esta progresión refleja la importancia de la experiencia y el dominio técnico para aumentar la velocidad con seguridad;
- Aunque algunos kitesurfistas han alcanzado velocidades extraordinarias, como el récord de 107 km/h de Alexandre Caizergues, la mayoría de los practicantes se centran en un equilibrio entre la emoción de la velocidad y el respeto a las condiciones marinas y meteorológicas. Este equilibrio es esencial para disfrutar del deporte con seguridad;
- La oferta de cursos de kitesurf, como los disponibles en Fuerteventura, hace hincapié en la importancia del aprendizaje continuo y la formación técnica. Mediante la instrucción profesional, los kiters pueden mejorar sus habilidades, aumentar su velocidad con seguridad y disfrutar plenamente de la experiencia del kitesurf.
Preguntas más frecuentes
¿Qué influye en la velocidad en el kitesurf?
La velocidad de un kiter puede verse influida por varios factores, como el tipo de cometa, el tamaño y la forma de la tabla, el peso del rider y las condiciones del viento. Una adecuada adecuación entre el equipo y las condiciones meteorológicas/marinas es crucial para optimizar el rendimiento y garantizar la seguridad.
¿Cuáles son las velocidades medias alcanzables?
Los kitesurfistas principiantes e intermedios pueden navegar a velocidades que oscilan entre 24-25 y 40 km/h. Con el aumento de la experiencia, los kitesurfistas experimentados pueden alcanzar velocidades más altas, acercándose o superando los 60 km/h. Los profesionales de competición pueden alcanzar y superar los 80 km/h.
La velocidad en el kitesurf: ¿por qué no hay que descuidar la seguridad?
Buscar la velocidad puede ser emocionante, pero la seguridad debe ser siempre lo primero. La mayoría de los kitesurfistas rozan unos 20-30 km/h. Ir demasiado rápido aumenta el riesgo de lesiones, sobre todo en aguas agitadas. Es importante encontrar un equilibrio entre velocidad, seguridad y respeto de las condiciones marinas y meteorológicas.